Los edificios son los responsables del 40% del consumo energético de la UE y del 36% de las emisiones de gases de efecto invernadero. La sostenibilidad y eficiencia de las edificaciones es un compromiso firme y para llevarlo a cabo la banca está ofreciendo préstamos hipotecarios que financian la adquisición de inmuebles con alta certificación energética o la rehabilitación o reforma que mejore en un 30% su eficiencia energética. Descubre en qué consiste una hipoteca verde.

Hace apenas un par de semanas, cuando todas las informaciones se centraban en su posible fusión con el Banco Sabadell, el BBVA lanzaba su hipoteca verde, un producto destinado a la compra de viviendas con máxima eficiencia energética. Según la información de la entidad bancaria, si la vivienda adquirida cumple con el criterio de calificación “A” energética, la hipoteca será bonificada, es decir, el interés por el préstamos hipotecario, será más bajo.

El BBVA se convierte así en el último banco que comercializa hipotecas verdes. El Banco de Santander, por ejemplo, bonifica en 10 puntos básicos (esto es, en un 0,1%) el tipo de interés por la compra de viviendas sostenibles. Y además ha lanzado un préstamo verde para financiar rehabilitaciones energéticas de entre 3.000 y 100.000 euros, con la colaboración del Banco Europeo de Inversiones (BEI).

Bankia, por su parte, bonifica la compra de viviendas con máxima eficiencia energética con 25 puntos básicos (es decir, con un 0,25%) frente a préstamos habituales. Otros bancos también ofrecen ventajas a sus usuarios. Pero es el holandés Triodos Bank el que sin duda va por delante de todos ellos, vinculando directamente el interés que cobra al cliente a la calificación energética de las viviendas, incluyendo diferenciales de 0,2% de acuerdo a escala de las certificaciones: A, B, C,… hasta la G.

Pero ¿qué es una hipoteca verde? ¿en qué casos se puede contratar? ¿merece la pena acogerse a este tipo de financiación? Vamos a ir intentando contestar a esta preguntas.

 

¿Qué es una hipoteca verde?

Básicamente, una hipoteca verde es un préstamo hipotecario que financia la adquisición de un inmueble que tenga una alta certificación energética –A+, A y B, generalmente– o una rehabilitación o reforma que mejore de forma garantizada la eficiencia energética. El beneficiario del préstamo hipotecario paga menos intereses que por un préstamo convencional, es decir, que la hipoteca se concede a un tipo de interés más bajo.

Las hipotecas verdes son un producto bancario incipiente y poco estandarizado todavía, impulsado por la Comisión Europea para contribuir a cumplir los objetivos climáticos y de ahorro de energía. Con el aval de la UE y dentro del proyecto Horizon 2020, la Federación Hipotecaria Europea puso en marcha un Plan de Acción de Hipotecas de Eficiencia Energética (EeMAP). Posteriormente, el Banco Europeo de Inversiones (BEI) y la Unión de Créditos Inmobiliarios (UCI) acordaron poner en marcha este plan en forma de préstamos hipotecarios verdes y de préstamos al consumo a particulares y comunidades de vecinos, tanto para la adquisición de viviendas como para la renovación de las ya existentes. Y finalmente, han sido las entidades bancarias las que han empezado a premiar al cliente con un descuento en el tipo de interés cuando el préstamos esta vinculado a una vivienda verde.

 

A la espera de una regulación europea para las hipotecas verdes

Es evidente que la eficiencia energética y la sostenibilidad ambiental son los pilares sobre los que va a girar la construcción de inmuebles y la renovación de los edificios ya existentes. La necesidad de rehabilitación y renovación urbana para cumplir con la normativa europea necesita de apoyos y fomentos económicos que faciliten su implementación. Por lo que más allá de las ayudas públicas y las bonificaciones fiscales, es muy importante que el sector financiero se sume al impulso de proyectos de construcción y renovación de edificios de alta eficiencia energética.

Las entidades bancarias aún son muy reservadas en este sentido. Muchas de ellas no disponen aún de hipotecas verdes y las que sí las tienen, no las publicitan demasiado, pese a la cada vez mayor demanda de clientes, sobre todo vinculados profesionalmente al mundo de la construcción.

Esto se debe a que las entidades bancarias están esperando a la creación de una hipoteca verde estandarizada a nivel europeo. Es decir, sometida a criterios regulados de valoración de los inmuebles en razón de la calificación energética, medición del impacto de las obras de rehabilitación o reforma, estandarización de los incentivos tanto para compradores como promotores y bancos, etc, etc, etc… En todos estos aspectos o indicadores clave a considerar en la hipoteca verde, trabaja a día de hoy la Federación Hipotecaria Europea a través del citado plan EeMAP.

Hasta entonces se da por hecho que los bancos continuarán impulsando hipotecas verdes, hasta convertirlas en un producto generalizado. El consejo de Meka3 es, por tanto, informarse detenidamente de estos préstamos y de sus condiciones que, en términos económicos, pueden suponer un ahorro considerable a la hora de realizar una rehabilitación que mejore los criterios de eficiencia energética de la edificación.